Mi rosa

Primorosa rosa, hermosa que alojas,
en tu  dulce fragancia vapores de un sueño,
que la vista embaucas con tus hojas rojas
y  escondes espinas que visten tu leño.

Yo quiero ser brisa que baje a besarte
cuando cada aurora anuncie el oriente,
y así junto al sol poder presentarte
la dulce alegría del día naciente.

Disputar a la abeja tu néctar goloso.
Ser viento que agite tu frágil corola.
Y volar a las nubes después tan dichoso
a dar tu perfume que al cielo acrisola.

Y luego en la tarde cuando el día muera
ser una luciérnaga que alumbre tu noche,
y dejar mi alma en la dulce espera
de ansiar la mañana cada medianoche.

"Disputar a la abeja tu néctar goloso.
Ser viento que agite tu frágil corola.
Y volar a las nubes después tan dichoso
a dar tu perfume que al cielo acrisola"

El hecho de pelearte con una abeja por el néctar de una flor a nivel metafórico y aplicándolo al terreno humano me ha parecido un verso muy sexy!
La rima en cada estrofa en consonante es exacta y eso le da ritmo al poema.
Me ha gustado

Como siempre, una lección de verso clásico. Habían ganas de leerte otra vez.

"Primorosa rosa, hermosa que alojas,"

Me he quedado dándole vueltas a ese primer verso. Al principio me pareció un error acompañar un sustantivo de dos adjetivos; por lo común, así suele ser en la inmensa mayoría de los casos. Sin embargo, en este caso concreto ocurre algo singular: la puntuación, que tampoco responde a lo que pide la lógica, rompe ese nexo fatal en dos unidades sintácticas, de manera tal que lo justifica. Y si lo justifica es también porque se produce una sonoridad agradable gracias al uso de la aliteración (ese siseo).

Por lo demás, es un poema de corte clásico (multimétrico, podríamos decir) y romántico, con imágenes que se hacen reconocibles en tu poesía.

Saludos, Ulises.