JUICIO MAÑANERO

En la bahía de tu mirada
moría mi desconsuelo,
que se me impregne
todo de ti, aullaba,
en ese amanecer violento,
que nublaba la distancia,
que borraba tu figura
y al rozar el sol tu cabello,
te volvías ser volátil
que asustado
emprendía el vuelo,
quedando yo sola,
expuesta al juicio mañanero,
tirada en el suelo
de tus mares,
remando entre las piedras
de mis sueños,
y así me topaba
con el olor a café
y el soñoliento panadero.

Empieza el poema con un alegato romántico, y sorprende bastante cómo en los últimos versos ese desamor toma un cariz cómico.

Saludos, Selene.

Óscar Bartolomé Poy escribió:Empieza el poema con un alegato romántico, y sorprende bastante cómo en los últimos versos ese desamor toma un cariz cómico.

Saludos, Selene.

Un poco como la vida misma, gracias por leer!