Melancolía

A esa hora luminosa
en que sin prisa huyes
de la prosa del mundo
y su desasosiego,
y detienes tu mirada escéptica
de oscuros alfabetos
para buscar las rosas detenidas,
sí, las rosas trémulas
inmarcesibles de tus sueños,
algo entonces, te une a ti mismo,
a tu misterio azul, sereno,
y contemplas los ojos casi cerrados
de un antiquísimo horizonte,
ante ti, silencioso y quieto.

Maduras hacia tu infancia
mar adentro, sin salpicar las olas
viviendo entre las cosas etéreas,
en los preludios de las palabras
donde no hay doblez alguna
en la aquiescencia del universo,
y una música lejana, como venida
de otro tiempo, se eleva en los cielos,
restos amorosos de una nana que se meció
contigo, con tu sangre de animal
indefenso, ebrio de espíritu,
jovial, risueño.

Después que cesa su música
se hace visible el silencio,
como una luz ingrávida
inmóvil, casi subterránea,
que escarba en la profundidad
de tu conmovida alma de niño,
el silencio, sus hilos, su trama
de luz que amortigua las palabras,
cuadro de naturaleza muerta,
sabor a pasas,
breve muerte donde se guarda la belleza,
humo, acaso,
hasta el incendio de la mente,
estrépito de pájaros asustados
que salen de sus jaulas.

Me ha parecido un poema muy sinestésico, y sé cuánto te gusta apelar a los sentidos. También he observado que has utilizado mucho, más que nunca, que yo recuerde, la adjetivación, y en ocasiones epítetos consecutivos. Por lo demás, creo que el poema tiene un ritmo muy vivo, trepidante, incluso, me atrevería a decir, y no faltan las clásicas referencias a la luz y al silencio, como si de un cuadro (una naturaleza muerta) se tratara. En este punto se echa de ver tu formación pictórica. Por último, esa melancolía del epígrafe se nos ofrece como una evocación de la infancia, con su crisol de pájaros en fuga.

Un abrazo, María.

Es un poema que invade los sentidos. El tono es preciso para el contenido, el lenguaje, la palabra escrita, y hasta las pausas, le dan mucha fuerza.
El inicio me pareció precioso:
"A esa hora luminosa
en que sin prisa huyes
de la prosa del mundo"
"las rosas detenidas,"

De la misma forma me llamaron la atencion esos: " preludios de las palabras"

Lumínico también:
"como una luz ingrávida
inmóvil, casi subterránea,
que escarba en la profundidad
de tu conmovida alma de niño"

En fin, qué te digo, que me encantado.

Un gran abrazo.

Óscar Bartolomé Poy escribió:Me ha parecido un poema muy sinestésico, y sé cuánto te gusta apelar a los sentidos. También he observado que has utilizado mucho, más que nunca, que yo recuerde, la adjetivación, y en ocasiones epítetos consecutivos. Por lo demás, creo que el poema tiene un ritmo muy vivo, trepidante, incluso, me atrevería a decir, y no faltan las clásicas referencias a la luz y al silencio, como si de un cuadro (una naturaleza muerta) se tratara. En este punto se echa de ver tu formación pictórica. Por último, esa melancolía del epígrafe se nos ofrece como una evocación de la infancia, con su crisol de pájaros en fuga.

Un abrazo, María.

Bueno, sabes que yo no me prodigo mucho en pulir y redondear los poemas, normalmente en mí se escriben solos, pero en este caso el poema era algo descriptivo de un momento, de ahí la adjetivación y los epítetos y está algo más cuidada la forma. Me alegra si te pareció sinestésico...viniendo de ti me parece un maravilloso cumplido. Ah! y felicidades por los 4 de ayer...,todo un repaso, hay que saber perder también.

Abrazo, Óscar.

_María