Oración 28 (o de como no desearte más, joderhostiasya)

Creo que ya no me queda nada por hacer.
Nada que racionalizar.
Nada que ocultar.

Mis armas letales ya no matan a los sentidos. Y el veneno que segregan no hincha e inmola a las mentiras que dibujé. Apreté tanto el lápiz, que solo quemando el papel, quizás, te vayas con el humo y un soplido distraído mande tus cenizas al otro lado de Venus.

Pero vuelvo a resucitar falacias como ave Fénix y sin heroicidad.

Ojalá fuera una diosa de verdad y pudiera arrancarme el lóbulo frontal y asarlo y dárselo a comer a los cerdos para no verte más en todos los detalles.

Lo he intentado. Juro que lo intento: ensayo cada rato filigranas con mis manos que por fin me traigan el milagro de olvidarte. Porque yo sí "quiero que te vayas, dolor", aunque no me quedes dentro, aunque seas la última forma.

quizas sea por sentirme identificada, pero cada uno de tus ultimos escritos me llega muy adentro