Tao-.

¿Llevaré un jazmín en la memoria
un dilatado espacio de conjuntivitis
ignorando el demonio metódico que
insiste en ejercer su espectro inválido
sobre llanuras absorbentes de testigos
titubeantes?¿ O serán mis sienes aislados
atolones de espejos difuminados que exijan
su voracidad a los tallos que emergen de la superficie
lisa de los dátiles? ¿Acabaré en este plano
dilapidado por rencores acuáticos que sumerjan
su perfume y aroma por territorios níveos como
espurios son los dedos que albergan frondas y huesos
indefinidos? ¡Oh mi corazón, tan hospitalario y vergel
de cientos de cenizas ya, ocupado por clínicas ambientales
y sueños de hombre, todavía! ¡Oh mi hueso puro inquietado
sólo por amores fugitivos y cremaciones indolentes! Búscame
luego, lejos del hastío, ¡vomitaré sobre los cementerios mis espumas
sapienciales!12/06/16

Entre preguntas retóricas y exclamaciones dejas un innúmero de imágenes singulares con un léxico feraz y una marcada isotopía de flores y frondas. Gran derroche de imaginación el tuyo. Me ha gustado.

Un abrazo.

Gracias Óscar, por tu considerada opinión hacia mi ''maltrecho'' poema. Es un gusto con lectores como tú. Gracias y un abrazo-.