Tardes de noviembre

Se marchan tristes las tardes de noviembre,
tristes como los vagabundos de Dickens,
tristes como los perros desahuciados
o los párvulos de las escuelas puritanas;

¿Dónde se marchan las tardes pesarosas?
parecen viejos soldados de la desesperanza
quebradas guerreras que vieron
a su exangüe rey desangrarse
otra tarde más, otra tarde más.

Yo recuerdo otros noviembres
vinieron vestidos de hogueras, de gitanos,
noviembres de canciones insurrectas
noviembres músicos, cómplices noviembres,
y tardes que solo morían
como los astutas colas de las lagartijas

Lánguidas se prenden
las luces cobrizas de las farolas,
presta cuidado, hermano,
no vaya a presentarse
un noviembre ocaso
en tu corazón.

Me ha gustado, sobre todo la tercera estrofa. Sí que es cierto que noviembre es un mes que pasa rápido, me ha parecido bonita la referencia a las tardes en concreto, pues es cierto que, al menos en España, con el cambio de hora las tardes duran menos y se tornan algo más tristes.

Un saludo.

Muchas gracias por tu amable comentario, Saliut.

Un saludo.

Intenso como volcándose en las brasas de lo que fué y ahora, tal vez, tan solo cenizas flotantes en viento frío!!!



Saludos literarios

Muchísimas gracias Máximo por tu crítica, así da gusto. Saludos literarios.