Puente sobre el abismo

Camino a este lado del abismo.
Paro, me vuelvo y te miro.
Ya soy paria en tu paraíso.
Destronado, hacia el destierro camino.

A mis hombros de hombre herido,
la mochila del negro destino.
Tras de mí, tú y tu ya lejano brillo.
Quieta. Fuego. Imán de acero frío.

Llueve.
Sobre mí caen las lágrimas del olvido.
Rayos.
De rabia bloquean mis sentidos.
Viento.
Me empuja al negro precipicio.

Ante mi el puente a lo desconocido
Desde el que arrojar mi carga de oscuridad,
de penas, daños, y desatinos.

Abriendo la pesada mochila, lanzo: falsedad,
antifaces, máscaras, vendas de ojos, tapones de oidos,
sueños sin cumplir y extraños desvarios.
Estómagos revueltos, preguntas sin sentido,
kilos de bloqueos, nudos dobles y olvidados olvidos.
Laberintos mentales con salida a ningún sitio.
Mundos paralelos con cortinas de humo,
planes sin hacer y caminos sin rumbo.
Ojeras ignoradas, llantos escondidos,
miradas frías y armarios llenos de olvido.
Daños ocultos en silencios retenidos
y dolor, inmenso dolor cautivo:
sordo, mudo, tapado...desconocido.
Errores del alma...jamás pretendidos.

Pero guardo para mi eterno camino:
noches sudando, cuerpos unidos,
manos temblando, mi labio mordido,
abrazos infinitos, "tu dolor es el mio"
llantos de hijos, "duerme cariño"
el sonido de tus tacones inundando el pasillo
el sol en tu rostro y tu boca en el mio
tu pelo en la ducha y tu voz en mi oído
mis manos en tu espalda y tus pies doloridos
"si caes, te levanto", "es para siempre, viejo mio"
el primer beso, el último vino
una diosa a mi lado, presumía contigo,
mi fe ciega en ti, tu sol en mi frío,
las fotos de vida, las tardes en el hotelito
mi princesita L, tu cuento no chino,
el olor de tu pelo, las paradas en el camino,
la tinta en tu piel, besos en tu ombligo,
Tus piernas en sueños, "¿te duchas conmigo?"
Londres de tu mano........el cielo era mío.

Arrojados dolores, errores, daños y olvidos,
llego a la otra orilla en calma, y con frío
Temblando, agotado, con cuerpo mínimo.
Ansiando que amanezca, y que acabe este camino
O quizás que no cese.... si fueras tú el destino.

Alzo la mirada y amanece.
Empieza otro día. Y estoy vivo.

Pluma azul escribió:Mucho has sufrido Rafa, mucho te ha decepcionado el destino, y aún te dañan los recuerdos. Me gustó tu poema tan intimista. Un cordial saludo.

Muchas gracias.
La poesía puede ser una terapia excelente. Al menos a mí me sirve para ayudarme a reubicar correctamente sentimientos, revisar objetivamente el pasado y superar las penas.

RafaelaDeroy escribió:

Poeta, ayeres que dejaron honda pena en vuestro corazón y ese recuerdo
abraza con la nostalgia que  hiere . Gracias por compartir ,
desde este rinconcito del sur, va un fraterno abrazo.

Muchas gracias por tus palabras.

MIGUELPOE escribió:Muy bonito, Rafa
sensibilidad y vivencias a flor de piel, sentidas.
Enhorabuena.

Muchas gracias por tus palabras Miguel.