recuerdos

Son las dos de la madrugada
y, como cada noche, comienza a caer
la cristalina agua que brota
de las fuentes de mis pupilas.
La soledad me abruma,
y la aterradora impotencia
de lo que un día fuimos,
y hoy se nos escapa de las manos.

Los recuerdos de todo lo que tuvimos,
de todo cuanto te tuve.
De los eternos paseos de la mano,
de abrazos que dan consuelo
cuando parece que nada puede calmar un llanto.
De los besos que volatizan las heridas,
de tus manos cuando acarician mi pelo,
haciendo desaparecer la pavorosa tormenta,
o al menos, que no pueda oírla.

De las reuniones familiares
llenas de risas a carcajadas,
de esas que te hacen olvidar,
de esas que hacen sentirte tan vivo.
De los primeros pasos
de los más risueños e inocentes,
pequeños y a la vez tan grandes.

Mes y medio sin verte.
A ti, que disipas las penas
con tan solo recordarme,
con mirarme al pasar a tu casa
y saber quién soy.
Nunca podrás imaginar
la riqueza que me das cuando sonríes,
y la falta que me haces.

Son las dos de la madrugada
y, como cada noche,
el eco de mis recuerdos
me rondan las entrañas.
Pues son esos recuerdos
los que me ayudan a resistir
el peso de este medroso presente,
porque mi mayor deseo es
poderlos vivir otra vez.

"Los recuerdos de todo lo que tuvimos,
de todo cuanto te tuve."

Éstos me parecen los versos más logrados.

Para bien (de algunos) y para mal (de muchos otros), parece que los próceres de este mal gobernado país (e incluyo a toda la clase política sin distinción de siglas salvo unas pocas, poquísimas excepciones) van a levantar muy pronto las medidas de confinamiento, así que pronto estarás con él.

Saludos, Celia.

Por desgracia (de todos), el problema no solo está en los que gobiernan el país de manera nefasta (incluyendo también a toda la clase política), sino también de la mala actuación de la mayoría de la población, la cual actuará de manera irresponsable (como muchos de ellos hoy están demostrando).
Cuando escribí esto al que más echaba en falta era a mi abuelo (entre otras personas). Soy enfermera, así que no creo que sea suficiente levantar el confinamiento para atreverme a ir a verle.

Agradezco mucho tus comentarios Óscar.
Espero que todos estéis llevando esta situación lo mejor posible.
Un saludo.

Celia Muñoz escribió:Por desgracia (de todos), el problema no solo está en los que gobiernan el país de manera nefasta (incluyendo también a toda la clase política), sino también de la mala actuación de la mayoría de la población, la cual actuará de manera irresponsable (como muchos de ellos hoy están demostrando).
Cuando escribí esto al que más echaba en falta era a mi abuelo (entre otras personas). Soy enfermera, así que no creo que sea suficiente levantar el confinamiento para atreverme a ir a verle.

Agradezco mucho tus comentarios Óscar.
Espero que todos estéis llevando esta situación lo mejor posible.
Un saludo.

Tienes toda la razón. Hay mucha, demasiada gente irresponsable. Por eso mismo, el gobierno no debería tomar medidas confiando en que prevalezca la responsabilidad cívica. Como le oí decir a un niño: "yo prefiero no salir a la calle porque el coronavirus es más listo que los políticos". Lo de hoy me temo que ha sido un paso atrás.

Para ver a tu abuelo deberás esperar más, sí.

Un saludo, y a cuidarse.

Espero y deseo que pronto vuelvas a sentir su mano cálida, y los recuerdos sean el presente.

Y sobre los gobiernos mejor no hablar, porque no se salva ni uno, pues no saben lo que se hacen, solo se preocupan de la economia, la salud es lo de menos, te dicen una cosa, luego otra, y así nos aturullan con sus insensateces y malas artes de gobierno.

Buenas noches Celia.